REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA EN SU NOMBRE JUZGADO SEGUNDO DE LOS MUNICIPIOS GUACARA Y SAN JOAQUIN DE LA DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO CARABOBO. SOLICITANTES: PEDRO OBISPO Y FLORINDA SILVA DE OBISPO, venezolanos, mayores de edad, titulares de las cédulas de identidad N° 3.387.291 Y 4.101.421, ambos de este domicilio. ABOGADO ASISTENTE: NELLY FUENMAYOR DIAZ, debidamente inscrita en el I. P. S. A. bajo el N° 54.784 MOTIVO: DIVORCIO 185-A. TIPO DE SENTENCIA: DEFINITIVA EXPEDIENTE: 2299/10 Por escrito presentado en fecha 17 de Diciembre de 2009, por los ciudadanos PEDRO OBISPO Y FLORINDA SILVA DE OBISPO, venezolanos, mayores de edad, titulares de las cédulas de identidad N° 3.387.291 y 4.101.421 y de este domicilio, manifestaron por ante el Tribunal Distribuidor de los Municipios Guacara y San Joaquín de esta Circunscripción Judicial estar separados de hecho y no haber llevado vida en común por más de cinco años; por esos motivos y con fundamento en lo dispuesto en el Artículo 185-A del Código Civil, solicitaron se decretara el Divorcio, correspondiéndole por sorteo su conocimiento a este despacho, quien lo admite para su tramitación en fecha 25 de Marzo de 2010. Emplazados los cónyuges y la Fiscal del Ministerio Público en Materia de Familia, en diligencia de fecha 25 de Marzo de 2010, los solicitantes: PEDRO OBISPO Y FLORINDA SILVA DE OBISPO, asistidos de abogado, se dieron por citados y ratificaron en todas y cada una de sus partes la Solicitud de Divorcio presentada. Dentro del lapso correspondiente, la Fiscal del Ministerio Público en Materia de Familia, presentó Informe en el cual manifiesta: “De la revisión practicada al expediente 2299-10… se observa que en el escrito de solicitud de Divorcio se encuentran llenos los extremos señalados en el artículo 185-A del Código civil Venezolano, en consecuencia, esta Representación Fiscal no Fiscal No tiene Objeciones que hacer al respecto…” El artículo 185-A del Código Civil establece: “Cuando los cónyuges han permanecidos separados de hecho por más de cinco (5) años, cualquiera de ellos podrá solicitar el divorcio, alegando ruptura prolongada de la vida en común”